lunes, 12 de febrero de 2018

Cruzando el arco íris

En paz descansen


Escribo cada entrada del blog con el único fin de ayudar a quienes un día decidieron o decidirán ampliar la familia con un conejito.
Y esta vez no es una excepción, tarde o temprano tendremos que enfrentarnos a la marcha de nuestro pequeño amigo.

No creo que nadie esté preparado para afrontar tan difícil situación y menos aún si se nos presenta de golpe. Los conejos son animales que normalmente no muestran sentirse débiles hasta que no se encuentran realmente mal, es por eso que siempre tenemos que prestar mucha atención a cualquier cambio que notemos.
Que pasen más tiempo del habitual durmiendo o quietos, falta de apetito, ausencia de cacas... son los principales síntomas que nos indicarán que algo no marcha bien.

Luchar por ellos aconsejados por el veterinario, poner todo nuestro empeño en que se tomen esas asquerosas medicinas que tanto les cuesta tragar, darles más mimos de los habituales, pasarnos la noche en vela asegurándonos de que comen algo, visitas de urgencias, esperar una llamada que nos tranquilice al escuchar que ha habido una mejoría... pero un día te das cuenta que tu pequeño te mira pidiéndote que se acabó, que sus fuerzas han llegado al límite y que el sufrimiento que siente no habrá medicamento que lo alivie.

Cuando ese día llegue será el más triste de nuestra vida, ese último viaje hacia el veterinario sabiendo que nunca más volveremos a ver como su naricita se mueve, como corría hacia nosotros al escuchar la bolsa de su comida preferida... ya no habrán riñas por encontrarnos un pis fuera de la esquinera, ni esa mirada de "yo no he sido" al comprobar que al mando de la tele le falta el botón del volumen.

Un día terrible desde luego, pero también sentiremos la satisfacción de haberle dado una familia y ese amor mutuo que a mucha gente le cuesta entender que pueda llegar a existir.

Hace dos años viví la experiencia de tener que dormir a Ethan, un precioso agaporni. Cuando llegamos al veterinario poco había que decir, nada, sólo dejarle en manos de la persona que le libraría de ese dolor que tenía desde hace días y que volvía una y otra vez... sólo que hoy sería diferente, sería para siempre.

Estuve torturándome a mí misma, me llamaba egoista, me preguntaba si de verdad nada más se podía haber hecho... le pedía perdón si en algo le había fallado...
Es un duelo por el que pasamos todos pero terminarás pudiendo irte a la cama con la tranquilidad de sentir que tu pequeño fue feliz y que cuando sufrió diste todo lo que estaba en tu mano y más, por atenuar su padecimiento.
Nuestro pequeño depende de nosotros, si un día elegiste darle una familia y demostrarle que el cariño existe, ten por seguro que cuando llegue el momento de dejarle cruzar el arcoíris también será un acto de amor.

No dejes que nadie te haga sentir culpable por estar triste tras su pérdida, "no era más que un conejo", quizás alguien te suelte eso cuando te vean llorar.
Sólo una persona que no sepa el verdadero significado de la palabra amar sería capaz de soltar semejante estupidez. Por eso más que nunca tendrás que hacer caso al refrán "a palabras necias, oídos sordos" y no se te ocurra reprimir tu pesar.
Compartir tu dolor con aquellos que adoramos a los animales te ayudará mucho a sobrellevar el tiempo que necesites en poder transformar la pena en alivio.

Una vez pase el tiempo que lo que tu pequeño vea al mirarte desde el cielo sea una sonrisa iluminada en tu cara al recordar sus trastadas o al imaginar su cabecita pegada en tu mano reclamando mimos. Y no a alguien atormentado por los remordimientos de no haber salido corriendo porque pensaba que se curaría solo o por no haber querido gastar esos euros que nos parecían demasiado por un "simple" análisis.

Empecé la entrada diciendo que cada cosa que escribo la hago para ayudar, espero que mis palabras sirvan para que cuando tu pequeño marche te consuele el saber que aunque te sientas culpable, hiciste lo correcto y que habrá ratos en los que no pararás de llorar y otros en los que reirás al ver esa foto donde parecía que suplicaba por un trozo de manzana.
Pero sobre todo quiero concienciar a aquellos que lamentablemente anteponen el dinero a costa de la salud y el sufrimiento del animal. Gente que sentada frente a un ordenador esperan un milagro mientras el conejo agoniza y que en cuanto leen que deben salir corriendo al veterinario ponen de excusa que viven lejos de la clínica que está de guardia o que los pocos ahorros que tienen no pueden gastarlos en curarle pero sí en ese vestido que lleva tiempo colgado en un escaparate por el que pasan cada mañana.

Al morir Ethan lo pasé tan mal que no me planteaba tener más animales en casa, por aquel entonces Molly y Nala ya formaban parte de la familia, y además sentía que si otro pajarillo llegaba a casa sería como reemplazarle.
Medio año después ya no pensaba igual, estaba preparada para darle un hogar a otro agaporni, dos para ser exactos, Jill y Nyah, y meses después se completó la familia con Hank, conejito del que ya os he hablado alguna que otra vez.

Si te encuentras en la misma situación sólo deja que sea el tiempo quien ordene tus sentimientos y si llegan nuevos animales o no, nunca nadie sustituirá a tu pequeño amigo.



8 comentarios:

  1. Hola Manuel..., a pesar de los cuidados, a pesar de haber estado pendiente en todo momento mi niño se ha ido, mi Mosto se ha ido..., tenía los pulmones fatal, la semana anterior le hicimos pruebas y todo era normal y antes de ayer se descubrió un tumor en el pulmón y el otro lo tenía encharcado... y finalmente le dio un infarto cuando iban a intervenirle, no llegaron ni a sedarle, aún con el oxígeno puesto y se fue..

    Sus hermanos lo buscan por la casa y nosotras lo vemos en todas partes..., sólo tenía dos años..

    La vete nos dijo que posiblemente debía de tener algo de componente genético porque no es común a esa edad, pero Mosto se estresaba mucho por todo, y eso también agravó su situación..

    Ahora está reunido con Perla y Dop, espero que se cuiden mucho entre ellos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo lamento mucho, Anette... A veces les ocurren estas cosas tan rápido, o no muestran síntomas, que no sabe uno por donde cogerlo y menos aún tiene tiempo de actuar. Hicisteis mucho por él y seguro que era consciente de ello.

      Sé que es un momento muy difícil, un abrazo y mucho ánimo.

      Eliminar
  2. Hola Manuel y Maite, acabo de ojear vuestro facebook del blog, cuantísimo lo siento, no tengo facebook, por lo que os lo digo por aquí..

    Habéis sido unos padres estupendos, pacientes, cariñosos, le habéis dado todo y más de lo que Croqueto podía esperar, era un conejo precioso y sin duda sé que ha sido envidiablemente feliz.

    Os mando un abrazo muy, muy fuerte, muchísimo ánimo y muchísimos lametones!

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias, Anette. Quiero creer que sí, que fuimos buenos padres y le hicimos feliz todo lo que pudimos. A él se le veía contento y eso, pero en un momento así siempre te queda la espinita de pensar si podrías haber hecho aún mejor su vida.

    Gracias por tus palabras, espero que vosotros, humanos y animalitos, estéis bien. Un abrazo también de nuestra parte.

    ResponderEliminar
  4. Mil gracias! Perdí a Bella el día de ayer y tus palabras han resarcido un poco mi inmenso dolor. Bendiciones!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, lamento mucho la pérdida de Bella, muchísima fuerza y ánimo.

      Eliminar
  5. He tenido a mi conejito casi 9 años . Mi Versace se me ha ido el miércoles 13 a las 14:40 después de su 3era operación.. No puedo con tanto dolor,ahora encontré esta pagina por casualidad..buscando un poco de consuelo ... espero con los días un poco de consuelo también 💔

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ante todo mucho ánimo, es enorme el dolor que dejan cuando se van y no hay palabras de consuelo. Solo el tiempo te irá ayudando poco a poco, intenta pensar en todo lo que has vivido con tu conejito, en todo el amor que le has dado y lo feliz que seguro fue a tu lado. Eso será lo que te dé fuerzas para hacerte sentir mejor al saber que gracias a ti, tuvo una buena vida. Abrazos.

      Eliminar